finanzas

El Tesoro le da un respiro al BCRA: se financiará por sí solo

jueves, 26 de marzo de 2015

Emitirá nuevos bonos a 12 y 18 meses, a imagen de las Letes y Bontes de fines de los 90

n el objetivo de evitar los riesgos monetarios y cambiarios que trae consigo la creciente monetización del déficit fiscal, el Ministerio de Economía anunció ayer que este viernes emitirá dos nuevos bonos de deuda en pesos con vencimientos en plazos de 12 y 18 meses.

Se trata del Bono del Tesoro Nacional, que ya apodaron Bonac, y que será regularmente ofrecido a bancos, fondos de inversión y compañías de seguros. La primera emisión será por un total de $ 3000 millones, que "podrá ampliarse", según detalló ayer esa cartera en un comunicado.

"Se licitará en dos series a 12 y 18 meses de plazo, que devengarán una tasa de interés variable pagadera trimestralmente en función del nivel de tasa de las Lebac (letras del Banco Central) a 90 días", se aclaró. Según la subasta de títulos que ese organismo realizó ayer (como hace cada semana), esto implica que el Tesoro deberá pagarles a los compradores una tasa que parte del 26,22% nominal anual.

REMINISCENCIAS

La emisión, confirmada por la tarde, había sido anticipada por el ministro Axel Kicillof durante la conferencia de prensa a la que convocó para advertirle al Citibank que, al firmar un acuerdo con Griesa y los fondos buitre, podría haber violado la ley argentina (ver página 18). Allí reconoció que Finanzas tenía en carpeta un "programa de emisión de letras", similar al que ejecutó el Tesoro en los años 90.

Vale recordar que, en esa década, el Gobierno recurría regularmente al mercado emitiendo Letras y Bonos del Tesoro (Letes y Bontes) para tomar fondos con los que cubría su déficit. Incluso llegó a fomentar la suscripción de esos títulos entre los pequeños ahorristas.

En la actualidad el rol de financista del Tesoro había recaído básicamente en el Banco Central (BCRA), que regularmente asiste al fisco por tres vías: la cesión de reservas (dólares), los adelantos transitorios (préstamos que tiene permitidos por Carta Orgánica, aunque limitadamente) y la cesión de utilidades. De hecho, sólo en el primer bimestre del año el BCRA le giró al Tesoro algo más de $ 17.000 millones.

La contrapartida es la cada vez mayor carga que afronta el BCRA por retirar parte de los pesos que emite sin costo para el Tesoro con la periódica y onerosa venta de letras y notas a los bancos, a los que paga a razón de $ 80.000 millones por esas inversiones. No en vano el sistema financiero (como sucedió a fines de los 90 con las Letes y los Bontes) hizo del acopio de estos títulos el negocio más rentable en la actualidad.

La emisiones de deuda en el mercado interno para afrontar gastos corrientes se reanudaron en 2014, cuando al llegar al tope de asistencia permitida del BCRA, y para tratar de quitarle aire a la corrida al dólar, el Gobierno emitió los títulos que denominó Bonar 2017 y Bocan 2016. Pero, por lo anunciado ayer, ya no se trataría de emisiones esporádicas, sino con cierta periodicidad.

Por lo pronto, para generar las condiciones para que los bancos puedan comprar el viernes el nuevo bono, el BCRA desistió de emitir ayer letras a un año de plazo y sólo lo hizo hasta 12 meses. Tal vez por eso el resultado de la licitación de ayer fue una expansión de $ 2847 millones, buscando asegurar la suscripción de los flamantes Bonac.

EL REAL QUEDA SIN FRENO DE MANO

El Banco Central de Brasil anunció anteayer por la noche que no extenderá su programa de intervención cambiaria para defender el valor del real (vigente desde agosto de 2013) más allá del 31 de este mes, ya que la combinación de problemas políticos locales y expectativas de un alza de las tasas en Estados Unidos hace más dura esa tarea. Pero aclaró que renovará los swaps que vencen tras el 1° de mayo. El anuncio no hizo más que agudizar la tendencia a la devaluación que la moneda brasileña ya mostraba. Ayer, tras tres jornadas consecutivas de recuperación, el real cayó 2,2% (de 3,127 a 3,20) frente al dólar. Con este retroceso, el real, que durante 2014 ya se había depreciado 13% frente al dólar, ahora acumula una caída de 16,8% en lo que va de este año frente a esa misma moneda y se quedó sin freno.. 

Fuente: La Nación