Cambio de esquema. El Banco Central flexibiliza su plan monetario para contener al dólar y la inflación

lunes, 22 de julio de 2019

El organismo tomará como meta de su programa el promedio bimestral de base monetaria, permitirá a los bancos utilizar una mayor porción de sus encajes para comprar Leliq y mantendrá el piso del 58% de tasa de interés hasta que se conozca el próximo dato de inflación del Indec.

Ante el riesgo cierto de incumplir con su meta de base monetaria en julio, el Banco Central anunció hoy una flexibilización del plan monetario implementado para luchar contra la inflación y la suba del dólar. Según confirmó el organismo esta mañana a través de un comunicado, se tomará como objetivo el promedio bimestral de base monetaria (hasta aquí era mensual) y se permitirá a los bancos usar más encajes para comprar Leliq.

Así lo definió esta mañana el Comité de Política Monetaria (Copom) del organismo defendió su decisión para evitar que el esquema monetario "se vuelva excesivamente contractivo en julio y expansivo en agosto", según el comunicado difundido por el BCRA.

De esta forma, se decidió utilizar el promedio bimestral de base monetaria para determinar el cumplimiento de la meta del programa porque "en una actitud precautoria, los bancos están integrando encajes durante el mes de julio por un monto mayor al requerido para el bimestre, esperándose por lo tanto una integración menor en agosto".

Por otra parte, el Copom elevó en 3 puntos porcentuales la fracción de los encajes bancarios (la parte de los depósitos de los clientes que las entidades financieras no pueden prestar o utilizar para otros instrumentos) que los bancos podrán emplear para comprar Leliq.

"Los encajes no remunerados limitan en rendimiento de los depósitos porque generan una brecha entre la tasa de política monetaria y la que reciben los ahorristas", detalla el comunicado del Copom.

A su vez, el organismo decidió extender el piso mínimo de la tasa de referencia (la resultante de sus licitaciones diarias de Leliq) en un 58% al menos hasta que el Indec difunda su próximo dato de inflación mensual (el de julio), a mediados de agosto, es decir, luego de las PASO. De esta forma, extiende ese piso, que inicialmente estaba vigente hasta fin de julio, al menos por una quincena, en una medida que busca que los bancos no reduzcan las tasas que ofrecen a los ahorristas por instrumentos en pesos como los plazos fijos.

Según los términos del programa monetario acordado con el FMI, el BCRA se comprometió a no expandir la base monetaria hasta fin de 2019, fijada en un valor de $1343 millones. Computar el promedio de dos meses en vez de los valores de julio permite un mayor plazo que escapa a la estacionalidad y la alta demanda de julio.

La semana pasada, las licitaciones diarias de Leliq arrojaron una baja de 0,3 puntos porcentuales en la tasa de interés de referencia (cerró a 58,71% el viernes) y una expansión monetaria superior a los $100.000 millones, escenario que dificultaba el cumplimiento de la meta mensual en julio.

Apoyo del FMI

Los cambios en el esquema de política monetaria anunciados por el Banco Central recibieron el visto bueno del FMI. Desde Washington, el vocero principal del organismo, Gerry Rice, sostuvo que el "FMI apoya los ajustes técnicos del Banco Central a su marco moentario".

"Estos cambios garantizarán que la política monetaria se mantenga orientada a asegurar un camino continuo de disminución de la inflación y buen funcionamiento del sistema financiero", agregó el funcionario en un comunicado.
 

Fuente: La Nación