política monetaria

El BCRA pidió a bancos que limiten los adelantos con tarjetas en el exterior

martes, 11 de septiembre de 2012

Fue parte de los últimos movimientos oficiales que hicieron desde algunos organismos para anular la fuga de dólares en la Argentina: entre fin de julio y la primera semana de agosto, el Banco Central había pedido a las operadoras de tarjetas de crédito que les informaran con el máximo detalle los gastos que habían hecho en los argentinos, rubro por rubro, en cada país.

La respuesta de las compañías fue la “materia prima” que usaron en esos días para tomar las decisiones de regulación que se conocieron más tarde, como el impuesto del 15% a las tarjetas de crédito y los paquetes turísticos. Pero sirvió, también, para alertar a los funcionarios sobre un dato que hasta entonces habían subestimado: el tamaño de algunas extracciones en dólares que habían hecho argentinos en el exterior, en concepto de “adelantos de tarjetas de crédito”. Y que en muchos casos, incluso, habían llegado a “desafiar” la regulación propia de cada banco, con montos sugestivos de hasta cinco cifras.

Desde el Central pidieron entonces a las entidades que analizaran mejor la política de adelantos en efectivo que estaban llevando adelante. Y que, en el caso de que lo creyeran necesario, limitaran los topes de las extracciones que pueden pedir los argentinos en el exterior.

Hasta hoy mismo, cualquier usuario de una tarjeta de crédito puede solicitar mensualmente a su banco, como “anticipo”, entre 20% y 25% de sus ingresos en pesos, a través de un cajero automático, y siempre y cuando posea su clave de seguridad. Cuando lo hace desde otro país, puede acceder a ese mismo monto pero convertido en dólares, al tipo de cambio oficial, para devolverlo recién a fin de mes, en pesos, y a la llegada de su resumen.

El mecanismo quedó como una vía de financiamiento más atractiva desde que la AFIP decidió aplicar el impuesto del 15% (en concepto de ganancias) sobre el consumo con plásticos en otros países. Actualmente, por ejemplo, un argentino con ingresos de $ 5.000 puede pedir a su banco entre u$s 200 y u$s 300 de adelanto si se encuentra en otro país. Esta proporción se mantiene en aquellos que poseen sueldos superiores a esa cifra, pero en general nunca puede exceder un máximo de u$s 2.000 mensuales. Al Banco Central le llamó la atención que, en pleno julio, se habían registrado en el sistema algunos adelantos muy superiores a ese monto.

En una ronda de consultas por el sector, El Cronista consignó ayer que, al menos hasta ahora, hubo sólo reducciones puntuales y aisladas en el sistema sobre algunos topes. La mayoría de los banqueros explicaron que no habían tomado ninguna decisión al respecto porque consideraban prácticamente despreciable el nivel de salida de dólares que se había registrado por esto en el último tiempo. “Explicamos al Banco Central que no era una cifra relevante: se fueron sólo u$s 2,2 millones en un mes”, se excusó un ejecutivo.

Los banqueros dicen también haber tenido que persuadir a los funcionarios sobre el pedido de información de los “rubros” en los que sus clientes habían gastado los saldos de sus tarjetas. “No tenemos acceso a eso: a nosotros nos llega solamente el ticket con la razón social, y no el rubro al que pertenece”, explicó un gerente de producto. Los funcionarios dicen haber recibido ese dato de las operadoras de tarjetas de crédito.  

Fuente: Lt10digital